LA UNIVERSIDAD DE SALAMANCA tiene el honor de convocar una vez más los Cursos de Especialización en Derecho. Después de la interrupción forzada por la pandemia, retomamos nuestro formato presencial más tradicional en la pasada edición de enero y ahora en junio volverá a ser posible ese intercambio de conocimientos y acrecentamiento de saberes que ya se ha convertido desde hace años en una más de las valiosas tradiciones de nuestro viejo Estudio.
Esta convocatoria vuelve a ser especialmente emocionante porque, desafortunadamente, la pandemia que hemos sufrido nos ha obligado a interrumpir la celebración de esta emblemática actividad durante dos años. Recibirles de nuevo significa que estamos superando este reto global, y que la inquietud académica y la sed de conocimiento prevalecen ante cualquier desafío.
Desde sus inicios, allá por el año 95 no ha cesado la corriente de influencias de ida y de vuelta, que de nuevo volvemos a concretar y a hacer presente en menos de tres semanas intensas. No en vano, hasta los vigentes Estatutos que rigen hoy día nuestra vida académica prevén expresamente que nuestra actividad debe orientarse a estimular las relaciones científicas y culturales con otras Universidades, “… en especial, con las europeas e hispanoamericanas”.
En realidad, para muchos de los profesores de la Universidad de Salamanca y de su personal de administración y servicios, el Océano Atlántico hace tiempo que ha sido reducido a la mínima expresión. Las relaciones académicas y personales entre ambos lados son gozosas y fructíferas y la reflexión conjunta sobre problemas similares se vuelve obligada en nuestra comunidad de razonamientos jurídicos.
Una vez más queremos invitarte a que se haga realidad esta maravilla de concentrar a ilustres juristas de diferentes latitudes en esta bella y acogedora ciudad, para que la sientan también suya para siempre y proclamen con orgullo por donde vayan que ustedes también han sido estudiantes del antiguo y afamado Estudio Salmantino.
Seguimos avanzando y más de 11.000 profesionales iberoamericanos nos han elegido para perfeccionar su preparación. Esto no puede ser casual.